Una de las características mas
importantes de la Encuesta Continua de Empleo es que nos permite revelar
tendencias dentro del mercado laboral.
En este sentido, lo que los datos nos indican es que en los últimos 18
meses la tasa de desempleo ha venido disminuyendo paulatina y sostenidamente,
pasando de 10,9% en el III trimestre del 2011, a 9,8% en el IV trimestre del
2012. Pero esta es apenas la mitad de la historia. La Encuesta también nos
permite medir la creación de empleo, así como el número de personas que sale a
buscar trabajo. Y esos datos deben ser agregados en el análisis, para una apropiada
evaluación de lo que está pasando en materia de empleo en Costa Rica.
Según los datos de la misma Encuesta, la
población costarricense crece alrededor de un 1,2% anualmente. Sin embargo, el
número de personas que salió a buscar trabajo en los últimos 18 meses triplicó
ese porcentaje –en el caso de las mujeres el porcentaje fue cinco veces mayor-,
cifra que atribuye el INEC a las expectativas positivas generadas por una
economía creciendo mas de 5%. Pese a ese aumento importante en la cantidad de
gente que salió a buscar trabajo, la economía empleó a mas de 77,000
costarricenses y confirmó la tendencia a la disminución del desempleo que se ha
venido observando en los últimos 6 trimestres. Pero es esa gran cantidad de
personas que salió a buscar trabajo la razón por la cual la tasa de desempleo
como tal no disminuye de manera más acelerada. Este es un hecho que no puede
obviarse a la hora de analizar lo que pasa.
Hechas estas precisiones debería
entenderse mejor lo que está pasando. La economía está creando una cantidad de
trabajos tal que puede absorber no solo el crecimiento normal de la fuerza de
trabajo, sino además un número extraordinario de personas que ante las
expectativas positivas decide salir a buscar empleo. Por eso el número de
ocupados crece, no ligeramente como lo dice el editorial, sino en una cantidad
que es a todas luces significativa. Y en el año 2011 la situación fue aun mas explosiva:
del I Trimestre del 2011 al I Trimestre del 2012, 174,000 personas encontraron trabajo,
de las casi 200,000 que salieron a buscarlo.
Es también por estas consideraciones, particulares
a la situación costarricense entre otras de índole técnico, que no es posible
comparar las cifras de desempleo de nuestro país con las de la región. Esta es
un imprecisión metodológica que no es menor. Pero en lo que sí se coincide es
en la tendencia a la baja del desempleo, que en nuestro país es algo viene
sucediendo en los últimos 18 meses.
Pero hay otros datos importantes, algunos
de los cuales revelan cambios importantes en la configuración del mercado
laboral costarricense. En el año 2012 se perdieron 8,625 empleos en el sector
primario y 6,083 en el secundario. Pero se crearon 97,078 en el sector
servicios, confirmando, no solo una transformación que ha venido experimentando
nuestra economía en los últimos años, sino además que la fuerza de trabajo
costarricense ha podido adaptarse a ese cambio.
En relación al subempleo, los datos
indican que existe una relación bastante directa entre la gran cantidad de
mujeres que salieron a buscar trabajo y el aumento en la ocupación en el sector
comercio. El análisis sugiere que se trata sobre todo de mujeres jóvenes que
ante la expectativa económica positiva deciden participar en el mercado
laboral, encontrando sobre todo espacio en el sector comercio, en jornadas
parciales. Hablamos mayoritariamente de personas que están sumando un ingreso
adicional a sus hogares, no de cabezas de hogar. Sin embargo, este es un grupo
que requiere contar con posibilidades para optar con mejor preparación que
permita aspirar a mejores puestos de trabajo.
Aquí es importante hacer notar que el
Gobierno ha venido impulsando políticas que mejoren la empleabilidad, como el
fortalecimiento de la educación técnica que ha venido realizando el MEP con la
apertura de 60 nuevos colegios de este tipo, que beneficia a casi 10,000
estudiantes; las conversaciones sostenidas con las universidades para que se
elaboren planes de estudio en carreras de gran demanda laboral, y el trabajo
del INA, que de la mano con organizaciones empresariales ha venido abriendo
opciones para capacitación técnica. A esto habría que sumarle los programas que
el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social ha venido ejecutando para enfrentar
el desempleo juvenil y el tema de los
jóvenes que ni estudian ni trabajan, como el programa Empleáte. Y no se puede
olvidar el programa Avancemos, absolutamente pertinente cuando se evidencia en
la ECE que el desempleo azota mayoritariamente a quienes tienen secundaria
incompleta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario