Es importante hacer un recuento del proceso de negociación sobre el FEES que se ha venido llevando a cabo desde hace varios meses. Contar con el panorama completo permitirá una mejor valoración de la oferta que hizo el Gobierno para el próximo año, la que, hasta este momento, no ha sido aceptada por las Universidades.
Las conversaciones entre Gobierno y Universidades se iniciaron cuando el Banco Central recalificó su proyección del comportamiento del PIB para el año 2009, que pasó de un crecimiento del 4.4% a una reducción de 1,8%. Esto significaba, si se aplicaba el mecanismo vigente para el cálculo del monto del FEES, que la estimación inicial que se había hecho, de alrededor de ¢195,000 millones para el 2009, tenía que ser reducida en poco más de ¢17,500 millones, dado que la actual fórmula de cálculo incluye un factor de indexación con el crecimiento del PIB. Dicho de manera sencilla, el monto del FEES aumenta, aparte de un porcentaje fijo que se otorga para preveer la inflación (y que se ajusta si la inflación termina siendo mayor a la estimada), lo que crece el PIB del país. Hasta ahora la fórmula ha sido muy positiva para las Universidades porque no solo el PIB no ha dejado de crecer, sino que además lo ha hecho de manera significativa. Pero para este año no solo no creció sino que se redujo, lo que significaba en la práctica que el monto estimado en octubre del año pasado debía ser ajustado acorde a la realidad económica del país.
El Gobierno, entendiendo que esta reducción podría tener un impacto enorme en el funcionamiento de las Universidades aceptó no hacer efectiva la rebaja de esos ¢17,500 millones, tal y como correspondía según el mecanismo de cálculo, pero solicitó que se aplazara el giro de aproximadamente la mitad de ese monto para el año entrante, una parte de la cual, dada la caída de los ingresos fiscales (cerca de $1000 millones), se financiará incluso con un recursos externos. Con un gran sentido de responsabilidad, las Universidades aceptaron esta propuesta, con lo que el tema del FEES para el 2009 quedó zanjado.
En este punto quisiera detenerme a llamar la atención sobre una cifra que menciono en el párrafo precedente y que merece un análisis especial. De la estimación de ingresos que sirvió para elaborar el presupuesto del Gobierno para este año, y dada la abrupta caída de la recaudación fiscal como consecuencia de la crisis económica y financiera, se tuvo que restar la nada despreciable suma de casi mil millones de dólares. Esto significa que el Gobierno cuenta con menos recursos para terminar el año, aun cuando está dispuesto a incurrir en un déficit fiscal para compensar esta caída. Pero lo cierto es que la situación es estrecha, para usar un término suave. En este contexto, la prioridad del Gobierno es proteger los programas sociales, para lo cual ha venido realizando los ajustes presupuestarios correspondientes. (A manera de ejemplo, MIDEPLAN recortó su presupuesto de este año en más de ¢100 millones, esfuerzo que, dado lo avanzado del año y el tamaño del presupuesto total de la institución constituyó un esfuerzo importante. Pero había que hacerlo).
Salvado el tema del presupuesto de este año, la Comisión de Enlace se abocó a la discusión del monto del FEES del año entrante. El Gobierno propuso un crecimiento de 6% más la inflación. Las Universidades respondieron con una propuesta que contiene un crecimiento del presupuesto de un 15% del FEES del año 2009, más el porcentaje de inflación del año, que el Banco Central estima en un 5%, más un monto fijo de $60 millones (sesenta millones de dólares) para equipamiento. Partiendo de los ¢195000 millones del FEES de este año, y haciendo una proyección del crecimiento del tipo de cambio, la cifra que se obtendría para el 2010 sería de al menos ¢274,000 millones de colones, un crecimiento nominal de alrededor del 40%.
A la luz del estado de las finanzas públicas esta propuesta resulta inalcanzable. Y aquí hay que dejar algo muy claro: todos los miembros de la Comisión de Enlace comprendemos con absoluta claridad la urgencia de invertir en educación. Pero existen factores coyunturales objetivos que deben ser valorados, como la disminución de los ingresos fiscales mencionada anteriormente, así como las necesidades de otros sectores, por mencionar solo algunos.
La contrapropuesta del Gobierno, definida a partir de un gran esfuerzo para buscar un punto intermedio que no frene el crecimiento real que han experimentado los presupuestos universitarios en los últimos años, y que le ha permitido a estas instituciones, en palabras de las autoridades universitarias, "un respiro para mejorar infraestructura y equipamiento", aumenta el FEES en un 16%, cifra que, contrastada con la situación fiscal, es a todas luces positiva. Pero además significa un aumento promedio real del 10% para cada año de la crisis, es decir, para 2009 y para 2010, porcentaje que coincide con lo que ha venido creciendo en el último quinquenio.
Esta propuesta significa que el FEES del próximo año alcanzará la cifra de ¢226,000 millones de colones, ¢31,000 millones más que el 2009. En las condiciones actuales, esta propuesta muestra el compromiso del Gobierno con la educación superior pública. Esperamos que las Universidades acepten este planteamiento, y que podamos iniciar desde ya la negociación de una nueva fórmula de financiamiento del FEES para el siguiente quinquenio, con la seguridad de que quienes integramos la Comisión de Enlace por parte del Gobierno, universitarios todos, estamos en la mejor disposición de encontrar un mecanismo favorable y que resulte aceptable para todas las partes.
1 comentario:
Estimado Ministro,
El presupuesto del 2010 no está dentro del FEES que ya venció y que se negoció en el gobierno de Abel Pacheco, ni en el FEES del próximo quinquenio, cuya negociación aún no comienza.
El gobierno ya cerró la negociación sobre el presupuesto del 2010.
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